13 DICIEMBRE 2025

© 2025 pepe fuentes
Autor
pepe fuentes
Año
2025
Localizacion
Toledo
Soporte de imagen
-DIGITAL 50
Fecha de diario
2025-12-13
Referencia
11303

DIARIO DE MI FELICIDAD 14 y 2
“Me di cuenta de que valía la pena vivir, aunque solo fuese para estar en silencio”. Manuel Vilas
Jueves, once de diciembre de dos mil veinticinco

… Pasé el resto de la mañana en el estudio. Comí a mi hora habitual. Por la tarde igual que todas; hasta las seis que bajé a cocinar una tortilla para cenar (me quedó sabrosa en exceso, y eso no me suele suceder).
A las ocho recogí a Gabriel en casa de su madre. De camino paré en el barrio de Naty, que quería ver a Gabriel y también vendría a cenar a casa. Al llegar, nos esperaba mi amigo Ángel, que también estaría.
El propósito era, además de vernos, cenar y pasar un rato juntos, ver el partido del Madrid, todos, los cuatro, somos muy madridistas. Naty y Ángel trajeron cosas de comer y beber.
Un momento así, como el que nos disponíamos a vivir es algo absolutamente extraordinario y feliz en mi vida.
Solo faltaba en la reunión mi amigo Armando (vive en Madrid), y habrían estado todos los que tienen un significado para m i vida, ahora. El resto de mi familia, Jackie, Lucía y Emma, estaban en Chicago.
Sentí que todo estaba bien. Al mismo tiempo que, también sabía que otra situación igual no se repetirá nunca.
Una de las circunstancias que alimentan la felicidad, al menos la mía, es que lo que haga sea irrepetible y por última vez, como la reunión de anoche. La lírica de los últimos actos.
El Madrid, perdió el partido, como es habitual últimamente, pero eso era lo de menos, solo un detalle sin importancia porque sucede con frecuencia. La derrota no nos disgustó especialmente porque seguimos con lo nuestro como si nada.
Dentro de apenas dos semanas, llegarán las superfiestas navideñas, donde todo el mundo está con su gente, viviendo momentos parecidos al nuestro de anoche, pero más intensos, risueños, aunque también previsibles, todos los años lo mismo ¡qué cansancio, por Dios!
Mi hijo estará con su propia familia en Chicago; Ángel con la suya al completo, en Toledo; Naty, no lo sé, supongo que con alguno de los suyos (fue de mi familia, pero ya no). Yo, permaneceré solo, en mi casa, como todos los días. Ninguna sorpresa alimentará esos días. La diferencia estriba en  que, como es cosa mía, apenas me canso.
Estaré solo y bien, seguro (tengo experiencia de años anteriores, que fueron estupendos). Estoy liberado de ver crecer o envejecer a otros, conmigo tengo bastante.
Sabiamente, prevalecerá un equilibrio que está más allá de mi voluntad porque será consecuencia de lo que constituye mi vida habitual y elegida, con luces y sombras; por eso, lo que suceda es lo mejor que me ocurrirá porque será un destilado de mi vida en libertad, luego con la felicidad asegurada.
No, no quiero vivir de un modo diferente a como lo hago. Soy adicto y sin capacidad ni deseo de rehabilitación.
Ayer, miércoles, en torno a las once, levantamos la reunión, que tan bien había estado. Ángel se fue. Llevé a Naty a su casa y a Gabriel a la de su madre.
Una noche para recordar, por eso lo cuento.
La Fotografía: Autorretrato realizado hoy mismo, como boceto preparatorio de mi privadísima fiesta navideña, una vez terminada la celebración a plena satisfacción. Es un ensayo general, incluido el vestuario, atrezo, tono y expresión gestual del monólogo (sin chistes). Así sucederá porque así está planeado y ensayado (aunque habrá margen para cambios de última hora). Será un éxito, una comedia graciosa, aunque sin público, por lo que no habrá risas y a las grabadas no pienso recurrir; como mucho, música de acompañamiento que elegiré en el último momento para que haya algo de improvisación, tan conveniente en las fiestas.

Pepe Fuentes ·